En 2017 escribí un artículo en este blog que hablaba sobre el desastre ecológico que se estaba produciendo en el Mar Menor (https://ecotoxsan.wordpress.com/2017/03/04/el-desastre-ecologico-del-mar-menor/). Ni imaginaba lo que se nos venía encima tan solo 2 años después. La playa de mi infancia, Villananitos, donde tantas horas he pasado junto a mi familia se convirtió en un cementerio de cientos de animales moribundos. Muchos de ellos jamás llegué a observarlos en su hábitat natural. Antonio Luengo, consejero de Agricultura del Gobierno regional de Murcia, ha indicado a los medios que se ha llevado a cabo la retirada de 3 toneladas de peces muertos en la playa de Villananitos de Lo Pagán que pertenece al municipio de San Pedro del Pinatar (Murcia) y alrededores. En este vídeo podemos ver a los animales muertos en la orilla:
Quiero explicar de forma sencilla y apta para cualquier público lo que está sucediendo a nivel ecológico en el Mar Menor de manera que aquellos que carecen de conocimientos avanzados en química, ecología y demás, puedan entender que está ocurriendo.
Se habla de los nitratos, el nitrógeno, etc. pero, ¿por qué es tan importante este elemento? El nitrógeno es un componente fundamental en los seres vivos ya que forma parte de moléculas tan importantes como los ácidos nucleicos que forman el material genético, las proteínas, etc. Este elemento constituye un 78% de la atmósfera, en forma de una molécula llamada dinitrógeno (N2) la cual no puede ser utilizada directamente por las plantas ya que no puede ser absorbida. Existen bacterias que fijan ese nitrógeno atmosférico y lo convierten en formas nitrogenadas utilizables por las plantas pero el ser humano ha desarrollado métodos de fijación de nitrógeno a nivel industrial para acelerar este proceso y mejorar así la productividad de sus campos. Se generan entonces fertilizantes nitrogenados que contienen nitratos (NO3–), compuestos químicos inorgánicos derivados del nitrógeno que sí pueden ser utilizados por las plantas, mejorando su crecimiento. Mediante la escorrentía superficial y la filtración a las aguas subterráneas, estos nitratos llegan a las masas de agua. Cuando llegan al Mar Menor son utilizados por el fitoplancton que crece en la superficie del agua impidiendo la entrada de la luz solar, lo que dificulta la fotosíntesis a las plantas y algas del fondo y provoca que estas acaben muriendo. En la descomposición de los cadáveres se consume el oxígeno del agua, por lo tanto, en las capas inferiores se crea una situación de anoxia (falta de oxígeno) que acaba con la vida de muchos organismos como peces o caballitos de mar. Este proceso se denomina eutrofización y es el que ha causado un descenso en la oxigenación del Mar Menor y ha provocado la muerte de los animales. Además, al ser una laguna, la movilidad del agua es menor que en mar abierto, lo que dificulta aún más la oxigenación de las aguas. En resumen, los animales han muerto asfixiados y el mar se ha convertido en la tristemente famosa «sopa verde».
Hemos mencionado que la escorrentía superficial es una de las razones por las que los nitratos llegan al Mar Menor pero, ¿qué es eso de la escorrentía? No es más que el agua que circula libremente por la superficie del suelo. Es lógico pensar que un relieve que dificulte la escorrentía impedirá el transporte de estos nitratos hacia el mar. Los agricultores deberán entonces hacer surcos en paralelo a la costa. Pero esto puede producir la acumulación de agua y el pudrimiento de las raíces en determinadas ocasiones, por lo que en los alrededores del Mar Menor es común ver surcos a favor de pendiente en dirección al mar. Esto provoca que ante unas lluvias, todos los nitratos vayan directos hacia la laguna. Es lo que podemos observar en la imagen siguiente, al fondo se observa el Mar Menor. Los surcos están perpendiculares a la línea de costa por lo que al caer la lluvia, arrastrará sin dificultad los sedimentos cargados de nitratos hacia la laguna.

Otro elemento crucial en esta fatídica historia es el trasvase Tajo-Segura, operativo durante los últimos 40 años. Este trasvase tenía previsto enviar más del doble del agua de la que realmente ha estado llegando a la región. El regadío se expandió conforme a un caudal irreal lo cual provocó que, para saciar las necesidades de agua, se sobreexplotaran los acuíferos subterráneos. Esta sobreexplotación junto con las filtraciones de nitratos han creado una red de aguas subterráneas contaminadas. Pozos ilegales por todos lados, nulo control sobre el total de agua extraída por ellos, vertidos y filtraciones a los acuíferos y a las ramblas que desembocan en el Mar Menor, desaladoras ilegales que desalan el agua salobre de los acuíferos y luego vierten salmuera cargada de nitratos al Mar Menor… En resumen, cientos de infraestructuras irregulares que han sido ignoradas en favor de la agricultura intensiva y que han acabado envenenando el Mar Menor.
Esta permisividad no ha sido exclusiva del ámbito de la agricultura. El desarrollo urbanístico desmesurado y mal planificado también son producto de la pasividad política que ha dominado esta región en las últimas décadas. En definitiva, se ha producido una explotación de un recurso natural como es el Mar Menor que ha sido totalmente insostenible y lo ha llevado al colapso.
En estos últimos días hemos podido ver como varios políticos han depositado la culpa del desastre a la gota fría o DANA. Hay que admitir que la gota fría de este año ha sido muy intensa pero este fenómeno meteorológico se produce de forma anual en la región de Murcia y no se toman las suficientes medidas para evitar tanto los daños personales y materiales como medioambientales. Desgraciadamente este año se ha producido una gran pérdida de vidas y hogares. A nivel medioambiental, si el estado del Mar Menor hubiera sido el adecuado, la DANA habría causado una alteración que probablemente el propio mar hubiera podido subsanar gracias a su autorregulación. Pero si a un enfermo terminal encima le cae el diluvio universal, el asunto tiene difícil arreglo. Además, se avecina otra DANA en los próximos días por lo que el espectáculo va a continuar y podremos ver escenas más dantescas aún. Desde mi punto de vista, echar la culpa a la gota fría es reírse de todos los españoles que sabemos perfectamente que las irregularidades vienen produciéndose desde hace décadas y ningún político ha tenido el valor de ponerles fin de raíz y salvar al Mar Menor.

Qué va a ser del Mar Menor está fundamentalmente en manos de la clase política. Deben establecer medidas de acción rápida y contundente para salvar lo poco que queda y hacerlo basándose en la evidencia científica. Nacras, caballitos, anguilas y otros organismos son al final los damnificados en este asunto. Las redes sociales y los medios de comunicación se han poblado estos días de imágenes de animales moribundos que hacen saltar las lágrimas a todos los que llevamos al Mar Menor en el corazón. Quiero recomendarles la cuenta de twitter de @MarmenorKO, un gran amante del Mar Menor que posee cientos de vídeos y fotografías sobre lo que era esta laguna y lo que podíamos ver bajo sus aguas. Espero que se tomen medidas para que en un futuro podamos seguir disfrutando de este ecosistema único.
Fuente de la imagen destacada: @MarmenorKO
Fuentes:
Delgado, A. y Tudela, A. (2019) Mar Menor: historia profunda de un desastre. Datadista. Última consulta el 18 de octubre de 2019 en: http://bit.ly/32sZy29
La Verdad/Agencia (2019) El bajo nivel de oxígeno del Mar Menor provoca la muerte de miles de peces en playas de San Pedro. La Verdad. Última consulta el 18 de octubre de 2019 en: http://bit.ly/35MWpwo
Ruiz, M. A. y Semitiel, M. (2019) La Fiscalía abre una investigación por la muerte de miles de peces y crustáceos en el Mar Menor. La Verdad. Última consulta el 18 de octubre de 2019 en: http://bit.ly/35Owd4i
Vadillo, V. (2019) Retiradas tres toneladas de peces muertos en el Mar Menor. El País. Última consulta el 18 de octubre de 2019 en: http://bit.ly/2VULQTn
Reblogueó esto en Biología en la URJCy comentado:
Excelente artículo de una alumna del Grado de Biología
Me gustaMe gusta
Estupendo artículo Sara, especialmente porque se ve que te toca muy de cerca. Yo quería señalar algo importante. En un sistema democrático los políticos hacen lo que hacen para conseguir votos que les permitan seguir en el poder. Con eso quiero decir que no debemos olvidar que hay grupos sociales que se oponen a otro tipo de gestión del Mar Menor. Echarle la culpa a los políticos parece que nos alivia porque nos quita de responsabilidad a los ciudadanos, pero ¿Por qué van los políticos a oponerse a los ciudadanos que NO quieren salvar el Mar Menor? ¿Qué razones de orden superior les impele? No debemos menospreciar las razones por las cuales los agricultores que viven de su duro trabajo prefieren centrarse en elevar la productividad de sus tierras a costa de perder un recurso que ¿qué aporta a la vida de los agricultores de Murcia? ¿Belleza? ¿Algunos turistas? ¿Algo de pesca? La cuestión que debemos responder los científicos es ¿Realmente el Mar Menor y su biodiversidad sólo aporta un poco de belleza a los turistas para que se relajen? Yo sé que no, que este ecosistema acuático es fundamental para la sostenibilidad de la agricultura en la zona , así como para la salud de la población murciana, pero ¿Estamos informando a los agricultores y a los murcianos de cómo les va a perjudicar la pérdida del ecosistema más allá de una foto bonita? Y ¿Es esta pérdida tan importante como para obligar a los agricultores a invertir el poco dinero del que disponen en cambiar su forma de producción?
Me gustaMe gusta
Tienes toda la razón, tendemos a echar la culpa a la clase política cuando realmente ellos están ahí representando lo que quiere la población que les ha votado. Como bien dices, la protección de los espacios naturales está muy condicionada por un factor: el valor que los ciudadanos quieran darle a ese espacio. Para los turistas tendrá un valor estético y de ocio, para las empresas es un lugar que les permite desarrollar su actividad y tener una fuente de ingresos, etc. En el caso de los agricultores, el Mar Menor puede ser un lugar que para ellos no tenga un valor ecológico, social o económico ya que no les repercute un beneficio directo. Por eso en conservación se habla de los mecanismos de compensación, aquellos que van a ver limitada su actividad (en este caso un descenso de la producción en favor de una agricultura más sostenible) deben recibir una compensación de aquellos que obtienen un beneficio de la explotación del recurso (por ejemplo, pescadores, empresas de turismo, etc.). Sin estos mecanismos las actividades de conservación se ven muy limitadas porque obtienen la negativa de ciertos grupos que no quieren limitar su actividad sin recibir algo a cambio. No podemos olvidar que debemos hacer partícipes a los actores sociales que explotan el recurso de la protección de este. Por ello creo que es importante que se desarrolle un comité científico donde haya expertos en conservación que diseñen las medidas de compensación que la clase política debe implementar para conseguir la protección del espacio. Me parece mejor solución esto que simplemente hacer la vista gorda y favorecer a un sector de la población, perjudicando al resto. Además tenemos la obligación legal de proteger estos espacios naturales ya que muchos de ellos son figuras de protección internacional como Red Natura 2000 o humedales RAMSAR. El Mar Menor no deja de ser un espacio que nos pertenece a todos y que solo unos pocos ejerzan su interés personal hace que caigamos en una tragedia de los comunes que podría ser evitable con una regulación legal adecuada y basada en la evidencia científica.
Me gustaMe gusta